La luna tiene dos lados; un lado con luz, otro obscuro, y una mitad en la que aparece la vida.

jueves, 14 de octubre de 2010

Bitacora lunar #14 "Otra sonrisa complaciente"

Kessey llega corriendo a la nave, atraves de la humareda se encuentra con
una pistola, detrás de esta; una mano que la sostiene, seguida por un rostro
verde repleto de arrugas, viejo pero en gran forma. Un ser entero,
muy entero a pesar de que se le nota una edad muy avanzada.

Este extraño ser le hace señas al almirante para que entre a la nave. Kessey
duda pero al mismo tiempo que el ser verde se posiciona detrás suyo con
la pistola encarada a su espalda el piensa en el hermoso rostro de Claire
y esta imagen y sentimiento lo motivan a moverse sin replica alguna.

Entrando a la nave Kessey se encuentra impresionado por la tecnología
que ve ahí; maquinas lectoras de mente, aparatos receptores de audio
de una intensidad de millones años luz. Pasando esta sala los dos entran
por una puerta donde Kessey es bienvenido amablemente por otros seres
verdes de un aspecto similar
al primero; viejos pero inteligentes y físicamente muy sanos. Uno de ellos
le ordena al que va con Kessey que lo deje de apuntar inmediatamente con
la pistola, el súbdito reacciona rápidamente retirándose de la habitación.

-Por favor disculpe a aquel violento compañero y sientese para platicar
hay tanto de que hacerlo.- le dice un ser del grupo al almirante mientras
los otros observan detenidamente.

Mientras Kessey se sienta varios pensamientos de desconfianza hacia
la amabilidad del discurso del ser verde se forman en su mente.
" Pide disculpas por algo que seguro el ordenó y llama compañero
al súbdito. Es tan amable conmigo como si fuera su amigo, tiene
algún interés en mi.". A la par del pensamiento vienen imagenes
a su mente de las maquinas de rastreo que vio pasando la
entrada de la nave.

Se despabila y se da cuenta de que el tiempo que lleva pensando
sin hablar se ha alargado y las miradas de los seres verdes se han
intensificado sobre el.

Se sienta por completo y esboza una sonrisa fingida.

viernes, 8 de octubre de 2010

Bitacora n#13 "Vuelven gloriosos"


Mientras en la tierra: la tripulación llega a la estación aeronáutica.
Son "bienvenidos" por una gran horda de gente que trabaja para la prensa
norteamericana, varios trabajadores de bajo rango de la estación y de los
cuatro tripulantes dos afortunados cuentan a sus familias entre los presentes.
Afortunados de que ellos siguen con vida aunque en silla de ruedas o totalmente
dopados en medicinas, o porque se decidieron en ir a verlos a su llegada.

Samantha, Clarie, Ignatius y Herman bajan por una escalera alfombrada con
terciopelo rojo. Todos les entregan aplausos y flores. Ellos caminan saludando
y sonriendo evitando mostrar gestos de confusión. Por la mente de Ignatius
cruzan imagenes televizadas de John Kennedy saludando desde su auto al pueblo.
La duda y sorpresa para todos es: porque el merito?, cual fue el credito de su
misión?; ( si es que hubo tal ) ¿¡sobrevivir!?.

Claire recuerda a Kessey y cae una lágrima de su ojo que todos los reporteros
enfocan con sus cámaras, ideal para la foto de primera plana. "Vuelven gloriosos"

lunes, 4 de octubre de 2010

Bitacora lunar #12 La paciencia; otro tipo de desesperación

Otro dia largo transcurre sin interrupciones dentro de la burbuja atmosferica
lo cual atormenta a Kessey, es una desesperación tremenda la que le colma
los nervios. Tiene un deseo: volver a ver a Claire; una de las tripulantes que
regresó a la tierra meses atras. El supone que ella tambien quiere verlo a el
y que los dos han estado papando moscas o pensando que la virgen les habla.

Los rezos que Kessey hisó por las noches de lo unico que sirvieron hasta ahora
es apaciguar su pasión.

El almirante saca de abajo de su cama la radio y se da cuenta de que a esta se
le termino la bateria. La decepción desaparece con un susto que tira a Kessey
de la cama, este es provocado por un ruido estrenduoso parecido al de un
choque de un auto contra otro. Dos metales chocando, Kessey intuye que algo
chocó contra la pared metalica que cubre su burbuja.

Velozmente asoma por la ventana y ve a pocos metros de distancia
una humareda que proviene de una gran maquina, "Un transporte espacial"
intuye Kessey mientras corre hacia este gritando- Gracias! Gracias! -
un grito lleno de felicidad. No sabe a quien o a que agradece tan solo
lo suelta al aire como un pajaro que canta por la alegria
que ocupa todo su cuerpo.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Bitacora lunar# 11 Solo con fe

En la soledad de la luna Kessey esta a la merced de cualquier otra especie que llegue a poblar esta esfera blanca. Indefenso. Jugando al azar con un destino desconocido. Esperando al tiempo o a Dios sabe lo que obtendra. Necesita dejar de vivir en el tiempo en que hizo la desición que lo tiene ahi parado tan ligero como una hoja que es arrastrada por el viento.

Consigo tiene datos y material para crear un ambiente habitable: una burbuja atmosferica que contiene agua, tierra, nutrientes (suplentes de energia solar) y semillas con las que podra crecer arboles; algunos para hacerse una cama y otros como el manzano para comer sus frutos. Placas de doble cobre para proteger la burbuja de meteoritos.

Todo este trabajo y sus resultados los disfruta el, un solo hombre... que por las noches (proporcionadas por su medioambiente artificial) dentro de su casa de cemento y ladrillo, hincado a lado de su cama de hojas y madera de roble reza porque una nave aterrize.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Bitacora lunar #10 "¿Porque habla tanto el perico? porque repite lo que escucha"."

El almirante Kessey reflexionó
El fué quien abandonó la tierra. Desde aquel lejano día en que la nave partió
del planeta su desición estaba hecha.
¿ porque escogió este final disfrazado de camino ?
Se encontraba cansado y desanimado.
Agotado de la incomprensión e indiferencia hacia su existencia.
Desde hace mucho tiempo que el escuchaba a otra persona
y no lograba entender, conceptualizar las palabras, de la misma manera:
se perdía en su propia conciencia. Recordó con gusto la comunicación
que existió cuando vivió cerca de sus familiares y amistades.
Recordó también su experiencia en las oficinas nauticas:

-Haz un reporte, no tengo tu tiempo.-

Un reporte con espacios que llenar:

Numero de placa:
Años en el servicio:
Solicitud:
Compromiso:
Firma:

Nada parecido a estar sentado en un mismo cuarto con otras
personas porque se quiere compartir. Lloró. Tuvo un sentimiento
revitalizante: se daba cuenta de aquello que ama y aquello que detesta.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Bitacora lunar #9 "El lugar desocupado."

Con las coordenadas 237 los tripulantes viajaban
con dirección al planeta tierra.
Herman, Samantha, Ignatius y Claire pasmados
en un silencio inquebrantable mirando desde sus
asientos atraves de las escotillas.
Enfocados en la distancia que iba acrecentando entre
ellos y el almirante de su grupo.
Contando estrella por estrella.

- Si el se quedó allá es porque eso quizó.- dijo en tono alto Ignatius.

El percibía un sentimiento colectivo.
La tristeza era obvia en cada uno de los semblantes.
-¿Acaso lo pensó bien?, me temo que hizó la desición INCORrecta.-
añadió Claire.

Rapido Herman rebatió, no con un argumento si no con otra pregunta
-¿Hicimos nosotros la desición CORrecta?-

Entonces los 4 se miraron a los ojos buscando alivio donde
solo encontraron mas duda.
- Parece que lo extrañamos.- sugirió Samantha.

Su descubrimiento trajo una calma a todos que luego
se convirtió en deseo en los ojos de Claire que se fijaron
en el radio comunicador.
El almirante Kessey tenia el par.
Claire inmóvil se hundió en confusión
"¿Que le diría? Sería tonto hablar para saludar..."

Era cierto Kessey se encontraba lejos, ausente del asiento
donde antes sus piernas
hacían hendiduras sobre la piel cromada.
El lugar desocupado.

lunes, 30 de agosto de 2010

Bitacora lunar nº8 "El habito no hace al monje"

Kessey se negó a regresar al planeta tierra,
los demás tripulantes de la misión partieron.
Al tomar en cuenta lo solitario del lugar el Almirante K.
empezó a preocuparse por su salud, a pensar si necesita
de otros humanos a su alrededor, tener metas y motivaciones.
Concluyó que estar solo no es un problema y que la salud
mental y corpórea que aprendió en su planeta natal son
una ilusión que dejaría de creer.

A la mano tenia provisiones de comida que racionaría,
mucha arena lunar en la que se podría entretener dibujando,
escribiendo y haciendo matemáticas. Y a partir de las herramientas
que sustrajó de la nave construirse un pequeño hogar.
Su pensamiento se dirigía ya a la esperanza de un futuro mientras
su existencia fluía en un presente aburrido y totalmente solitario...

De un sacudon decidió romper la linea que lo llevaba a un abismo,
a un agujero negro. Se levantó y buscó en su maleta una barra de metal
con la que trazó sobre el polvo lunar una circunferencia,
sobre su contorno a un astronauta bailando.